El inicio: Cuestiones de Familia.

Yo quería ir por Chapistián a la Capital. Hace dias lo planeaba, pero mi papá sospechaba y se oponía...
Fuí a engrupirme a mi mamá. Se notaba abatida... Compartimos un cigarro y entablamos una tertulia.
Me dice que su vida es una mierda, que la cagó y lo sigue haciendo. Que es una mentirosa y que no sabe que hacer.
"Yo no quiero a tu papá" - Dice.
"Ya lo sé" - Pienso yo.
"No tengo intimidad con él, ni vida de pareja... Hace años. Ya no lo soporto. Está todo el día molesto, con cara de perro. Se queja de los perros... Ya no lo amo, hace mucho tiempo que no... Quiero que se vaya de aca...
No soy feliz junto a él... Quiero que nos separemos."

 Hace rato que vengo escuchando ese cuento. Por parte de ambos, de hecho. Y en realidad, honestamente, nunca le dí mucha importancia. No en el sentido de que no me interese... o que me dé lo mismo. sino que creía que nada cambiaría. Las confesiones de mi mamá fueron la corroboración de información que ya intuía. Además pensaba que separados estarian solos... y que necesitaban el uno del otro para el dia a dia. Por otro lado, ya estaban separados de antes.
Pero eso no era todo.

"Tengo otra pareja... Lo veo hace ocho años..."

 Ahí me transporté hacia cuando yo tenía once.. y mi mamá se había venido a Valparaíso con otro hombre... Yeyo se llamaba. Siempre sue que mantenía algo con él... siempre lo creí. Pero también sospechaba más... Algo que calzaba perfectamente con la fecha... y fué el motivo por el cual mi mamá regresó a la casa.
La Guilianna.

"La Guilianna es hija de él."

Todo encajó.