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viernes, 1 de enero de 2010

Historias: 1

Lo conocí en la vida y me llamo la atención... no podria decir que fue lo que me gustó. Tal vez una suerte de locura en su forma de actuar, era sumamente atractiva.
Pero me aleje, me dije: "naahh" y camine en dirección opuesta.
Dos años despues me lo encontré. Y me pasó exactamente lo mismo, fue verlo y decir "wuaw"... para luego darle la espalda otra vez y seguir hacia otro lugar (en ese caso, ir a otra habitación de la casa) el encuentro fue sumamente sorpresivo... y solo atiné a huir... además, confundí a su acompañante con un amigo mio, lo que fomento mi escape.
Fue una noche agradable... ni fu ni fa, nada, cero contacto. Un encuentro fortuito en medio de un viaje tal vez. O de repente una conversá rápida al lado de la parrilla... solos. Eso me ponia bastante nerviosa,asi que hable mucho, lo curioso fue que él me encontraba la razón y me hacia sentir bien conversarle. Pero igual huí.
De pronto queria hacercarme, pero luego me repetí el "Nahh" asi que me fuí.
Cuando todos estaban dispuestos en sus aposentos y solo quedabamos la cumpleañera, el y yo nos encontramos revueltos en un sillón. Lo curioso fue que lo sentí muy cerca de mi corazón. Ojo, no en el sentido emosional, fue más que nada porqueel tarao estaba muy cerca de mi pecho y sentia como se hundia en el... se sumergia...
Yo no lo entendía en verdad, pero a la hora de decir adios sé que el no queria irse de ahi.